Demanda de semis de cobre podría alcanzar los 40,4 millones de toneladas por año para 2030

Informe de BMO Capital Markets aborda el alcance de la destrucción de la demanda de cobre a través del ahorro y la sustitución.

Existen escasos descubrimientos importantes mineros nuevos, además de una producción cada vez menor. Las preocupaciones sobre la escasez de suministro han llegado a los gobiernos y las juntas, y los usuarios de cobre ya buscan soluciones a más corto plazo para evitar la carencia del recurso. 

En este sentido, un nuevo informe detallado de BMO Capital Markets profundiza el alcance de la destrucción de la demanda de cobre a través del ahorro y la sustitución. BMO sostiene que en ausencia de más sustitución o ahorro, la demanda de semis de cobre podría alcanzar los 40,4 millones de toneladas por año para 2030. 

La predicción de la demanda máxima que hace la banca de inversiones es superior a los 31,8 millones de toneladas del año pasado, o una tasa de crecimiento compuesto 2022-2030 del 3%, según indica mining.com. 

Por su parte, los autores afirman que hay margen y programas ya instituidos por fabricantes de equipos originales para usar menos cobre o sustituirlo por completo, incluso en redes de transmisión y distribución de electricidad, capacidad de generación renovable, cables de comunicación, unidades industriales de aire acondicionado y el sector del transporte.

En la misma línea, el cobre es cuatro veces más caro que el aluminio en este momento, pero lo suficientemente barato como para que el metal reemplace al cobre de manera constante, según BMO. Aunque el aluminio solo tiene alrededor del 60% de la conductividad del cobre, su menor peso podría hacer que la sustitución sea más convincente por encima de las consideraciones de costo. 

El banco de inversión visualiza los sistemas de aire acondicionado como un área más expuesta, particularmente en aplicaciones industriales donde la sustitución es técnicamente viable. Los autores piensan en el gigante del aire acondicionado Daikin, que tiene como objetivo reducir a la mitad su consumo mundial de cobre para fines del próximo año.

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