El primer cargador de autos eléctricos nacional

En un hito histórico para la innovación tecnológica en Chile, académicos y estudiantes de la Universidad de Santiago de Chile (USACH) han colaborado para desarrollar el primer cargador para autos eléctricos de fabricación nacional.

Dante Carrasco, ex estudiantes y ahora Gerente General de E2 Ingeniería, destaca que este cargador representa un avance tecnológico significativo al permitir la carga regulada de vehículos eléctricos. Los usuarios tienen la capacidad de ajustar la intensidad de corriente que desean para cargar sus vehículos, además de contar con funciones de gestión de carga, brindando una experiencia personalizada y eficiente.

Matías Díaz, Profesor Asociado de la USACH, señala que la iniciativa surgió ante la escasa oferta de cargadores en el mercado, con precios elevados y un desconocimiento generalizado sobre la compatibilidad con los vehículos eléctricos disponibles. Destaca que, aunque la tecnología de autos eléctricos no es nueva (data de 1839), se busca implementar un sistema más eficiente y adecuado a las necesidades actuales.

El cargador desarrollado es compatible con cualquier auto eléctrico y ofrece velocidades de carga de 7KW en monofásico y 21KW en trifásico.

En el contexto de los esfuerzos de Chile por avanzar hacia la sostenibilidad, la meta de convertir el 100% del transporte público en eléctrico para el 2035 cobra relevancia, y este proyecto contribuye directamente a ese objetivo.

Matías Díaz, quien fue el profesor guía en la tesis de Dante Carrasco, destaca la importancia de esta colaboración entre alumnos, profesores y la industria. Este proyecto no solo representa un avance tecnológico sino también un vínculo exitoso entre la academia y el sector empresarial.

En un contexto global, donde China lidera la fabricación de autos eléctricos, Chile busca consolidarse en este mercado emergente. Según las cifras, se estima que han ingresado 7 mil autos eléctricos al país en lo que va del año, principalmente debido a su asequibilidad, siendo aproximadamente ocho veces más económicos que los vehículos a combustión.

Este logro marca un paso importante hacia la independencia tecnológica y la adopción de soluciones sostenibles en el transporte en Chile. La colaboración entre la academia y la industria demuestra que la innovación local puede liderar el camino hacia un futuro más limpio y eficiente en movilidad eléctrica.

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