Capacidad de generación eléctrica en Antofagasta ha crecido 80%

La Universidad de Antofagasta, en conjunto con el Coordinador Eléctrico Nacional, desarrollaron un conversatorio en torno a los desafíos de la transición energética y el rol de la región.

Un alza de 80% en la capacidad instalada de generación eléctrica ha experimentado la región de Antofagasta desde 2018 hasta la actualidad, totalizando más de 9.500 MW.

De ellos, 3.900 MW son de capacidad solar, 2.500 MW en base a gas natural, 1.800 MW en carbón, 1.100 MW eólicos, entre otros, lo que da cuenta de la transformación que ha experimentado esta región en el proceso de transición energética, fenómeno que grafica la incorporación de nuevas tecnologías de generación, así como la electrificación de los consumos.

Este fue el tema central abordado en el conversatorio “En el centro de la Transición Energética: el rol clave de Antofagasta”, organizado en conjunto entre la Universidad de Antofagasta y el Coordinador Eléctrico Nacional. 

“Antofagasta es rica en recursos naturales y tiene un potencial energético enorme, lo que la posiciona con la posibilidad de ser un líder indiscutible en la transición energética de Chile y el mundo. Es la región con mayor capacidad instalada de centrales eléctricas en el país, se están desarrollando proyectos importantes de transmisión y, en los próximos años, se instalarán equipos claves para dar fortaleza a la red en la zona norte”, dijo el presidente del Consejo Directivo del Coordinador, Juan Carlos Olmedo.

“En este contexto, la Universidad de Antofagasta, a través del Centro de Desarrollo Energético, asume un rol fundamental. Estamos formamos a los futuros profesionales que enfrentarán y resolverán los desafíos de la transición energética, y al mismo tiempo abrimos el espacio donde la investigación y la innovación se encuentran al servicio de la comunidad. Nuestra misión es preparar a los líderes que, con una visión integral, se harán cargo de las complejas intersecciones entre tecnología, medio ambiente y sociedad”, recalcó el rector Marcos Cikutovic.

La Decana de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Antofagasta, Dra. Marinka Varas Parra, señaló la importancia del encuentro al profundizar en el rol crucial de la academia en la formación de profesionales, la investigación aplicada y la colaboración con la industria para avanzar hacia un futuro más sostenible.

“El sistema eléctrico chileno está transformándose aceleradamente”

En el encuentro se dio cuenta de los desafíos que implica para el país la transición energética, por ejemplo en el manejo de rampas de generación cuando entra y sale la generación solar, o el efecto de disminución de atributos que dan fortaleza a la red eléctrica con el retiro de generación convencional y las inversiones que se han tomado para contrarrestarlo.

En su presentación, el director ejecutivo del Coordinador, Ernesto Huber, graficó el volumen de generación solar y eólica que se ha instalado en el país con casi 16.000 MW, de los cuales 10.800 MW están en la zona norte, lo que pone desafíos para aprovechar esa electricidad, dado que la demanda máxima del sistema está en torno a 12.000 MW. “El sistema eléctrico chileno está transformándose aceleradamente”, dijo Huber y recalcó los aspectos que permiten una operación segura y a mínimo costo.

En esa línea, destacó la adjudicación de equipos claves para viabilizar el retiro de centrales térmicas convencionales, por una inversión total en torno a US$ 500 millones que se realizará principalmente en la región. “El funcionamiento de condensadores sincrónicos a partir de 2027 permitirá tener una red con mayor fortaleza, lo que contribuye a una operación segura para el suministro de hogares, empresas y negocios en general”, dijo.

Huber detalló además cómo se ha ido incorporando almacenamiento eléctrico (BESS), donde ya hay del orden de 500 MW operando, más 300 MW en pruebas y unos 1.000 MW en construcción, lo que permite aprovechar parte de la sobreoferta que se está viendo en horario solar.

Además, destacó que el Coordinador Eléctrico delineó una Hoja de Ruta para una Transición Energética Acelerada que le permita estar preparado para operar una red que pueda tener energía 100% renovable algunas horas del día hacia 2030, lo que depende que se concreten una serie de condiciones habilitantes.

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