Cristóbal Rivas: “Tiene sentido que el MOP concentre los esfuerzos para dar solución real al problema del agua”

El gerente general de Wiseconn, agregó que el Estado puede ser determinante en el impulsar el desarrollo tecnológico que permita tanto a empresas como agricultores optimizar de mejor manera el agua.

La racionalización y el buen uso del agua en tiempos de sequía es un tema que sigue siendo relevante para todos los sectores productivos, por lo que la optimización del recurso a través de la tecnología cada vez cobra más interés. 

En ese sentido, en el marco del Día Mundial del Agua, el gerente general de Wiseconn, Cristóbal Rivas sostiene que es relevante que el Estado pueda ser determinante en el impulsar el desarrollo tecnológico que permita tanto a empresas como agricultores optimizar de mejor manera el agua en los campos. 

“Es super importante que se expandan y se formalicen los incentivos para la adopción de tecnologías. En los últimos años se han creado programas especiales en los subsidios que entrega la Comisión Nacional de Riego, pero creemos que deben ser incorporados los incentivos para que todos los proyectos de riego incorporen tecnología”, sostiene Rivas.

Wiseconn lleva más de 10 años distribuyendo en campos de Chile, Estados Unidos y Australia, entre otros, su tecnología Dropcontrol, un software que permite determinar a través de sensores las condiciones meteorológicas, la humedad del suelo y todas las variables ligadas al funcionamiento del riego como caudales, niveles de estanques, presiones, que permitan un ahorro de agua entre un 20% y 40%. 

Dentro de ese contexto, la firma sostiene que hoy en día, bajo las actuales condiciones, un proyecto de riego puede incluir tecnología, pero debido al diseño de las bases de cálculo, el puntaje obtenido es menor y bajan las posibilidades de que un agricultor obtenga un subsidio por parte del Estado. 

Por eso Cristóbal Rivas sostiene que es determinante el rol estatal. “El Estado debe ser el propulsor del cambio, dándole una relevancia y el correcto valor que tiene el manejo de información, tanto para los privados como para el Estado”, recalca.

Nuevo Rol del MOP

En ese panorama, el anuncio del Ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, de que el Ministerio pasará a llamarse de “Obras Públicas y del Agua” fue bien recibido. “Es una noticia conceptualmente super buena. No hay duda que si queremos como país hacer más eficiente el uso del agua, estas iniciativas apuntan en la dirección correcta”, indica Rivas. 

Actualmente existen 47 organismos del estado que tienen relación con el agua y su uso; de estos, algunos solamente dependen del MOP. “Por eso tiene mucho sentido poder concentrar los esfuerzos para que puedan coordinarse mejor y dar soluciones reales a un problema tan complejo y que toca a tantos sectores como es el agua”, subraya.

Junto con crear una subsecretaría del Agua al interior del MOP, la complejidad estará en que el Ministerio absorba las atribuciones de otros organismos. “Lo complejo o desafiante desde un punto de vista operativo y legal, es poder absorber las atribuciones que poseen organismos actualmente fuera del MOP, por lo que en estricto rigor va a ser un cambio transversal en varios ministerios”.

Impacto de la Sequía

De no adoptarse la tecnología adecuada para la optimización del agua, la sequía podría disminuir los niveles de productividad. “Está claro que la productividad anual se verá disminuida, pero también el valor de la tierra, se verá afectado negativamente si un usuario no es eficiente con el uso de su agua”, dice el gerente general de Wiseconn.

Por eso, la firma plantea que el uso de tecnologías “es la inversión marginal más baja que tiene el mayor retorno en mejor productividad y ahorros”. 

“En un futuro cercano, simplemente las empresas que no adopten tecnología perderán productividad y competitividad tal como si una empresa de cualquier rubro hoy decidiera no tener computadores para sus empleados”, concluye Rivas.    

Los desafíos

Para Wiseconn, el principal desafío que se presenta para el futuro del agua es el cambio de paradigma en la agricultura donde el uso de datos objetivos sea su principal insumo para la toma de decisiones. 

“Esto es un tremendo desafío desde el punto de vista de los recursos, pero incluso más de capital humano para hacerse cargo y poder sacar el mayor provecho de la tecnología. Por suerte el avance en educación digital y lo común que es hoy para la gente realizar más y más tareas desde aplicaciones móviles, hacen que al menos la primera resistencia al cambio, ya no sea tan grande”, dice Cristóbal Rivas.

A nivel global, en tanto, señala que las metas están en solucionar las dificultades causadas por la falta de información con la que cuentan tanto las empresas y agricultores en el uso del agua, y el Estado como entre observador y regulador. “Sin información transparente y oportuna, es imposible pensar en mercados de agua funcionales que realmente funcionen para que los precios regulen el uso”, enfatiza el ejecutivo.

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