Cámara Minera de Chile llama a visibilizar los riesgos en torno a la minería del litio

El secretario general, Patricio Cartagena señaló que existen riegos geológicos, ambientales, sociales y territoriales, pero que nada era impedimento para su explotación.

¿Cua´les son los riesgos y desafíos en la minería del litio? La Cámara Minera de Chile respondió a esa pregunta durante, el Webinar: "Minería del Litio, Estudio de casos ante SEIA, organizado por la carrera de Derecho de la Universidad de Atacama. 

Durante la instancia, el secretario general, Patricio Cartagena presentó "Industria del Litio: Desafíos y Riesgos en su Desarrollo", a través de la que se refirió al contexto en el que se desarrolla el negocio de este mineral. 

En este contexto, indicó que Cochilco proyecta de la demanda global se incremente desde 508 kt de carbonato de litio Equivalente (LCE) en 2021 hasta 3.828 kt LCE en 2023, lo que supone un crecimiento anual compuesto de 15,5%; en tanto, se proyecta un crecimiento de producción mina de un 12,6% al año 2035. 

Bajo este panorama, la industria del litio podría aportar ingresos anuales permanente al fisco de entre 0.9 y 1,1 puntos del PIB; pasando de US$5.1 mil millones 2022 y US$3.1 mil millones ya a septiembre del 2023.

Riegos en la minería del litio

Sin embargo, el énfasis de su exposición se dio en los desafíos y riesgos que el negocio del mineral blanco tiene. "Estos son diversos como los geológicos, pro la baja información geológica, geoquímica e hidrogeología; los riesgos ambientales por el desconocimiento de la biodiversidad de los salares; de productividad, se requiere de mayor producción, pero con nuevas tecnologías; con extracción directa de las salmueras y métodos de reinyección", explicó.

Otros temas que hay que considerar, según el secretario general de la Cámara Minera de Chile, son los riesgos sociales y territoriales; los normativos, por el déficit en la regulación sobre el acceso al recurso litio, derechos y obligaciones de las partes en modelos contractuales, criterios para licitaciones y alcance del mandato a empresas públicas para negociar con privados.

A los que hay que sumar los riesgos institucionales, políticos y de mercado. “Sin embargo nada de ello es impedimento para llevar adelante la industria del litio en nuestro país; se requiere que más actores participen, lo que no solo es un aporte para el desarrollo de este sector, sino que también para el país y agregar valor a través de la generación de nuevas tecnologías que permitan que sea un negocio sustentable”, concluyó Patricio Cartagena.

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