Inteligencia artificial y big data impulsan la productividad en la industria minera

Opinión de José Medina, Gerente de Cuentas Clave Empresariales de Vertiv Chile

La inteligencia artificial (IA) en el mercado minero podría crecer a una tasa compuesta anual (CAGR) significativa del 14.8% durante el período 2024-2031, debido a una mayor demanda de eficiencia operativa y seguridad en las operaciones mineras (Orion Market Research).

La minería inteligente es la adaptación de la industria 4.0 en toda su cadena de valor y representa el concepto de minería del futuro, según el Mining of the Future del Andes Pacific Technology Access. Mediante el uso integrado de tecnologías como inteligencia artificial, big data y automatización, la industria minera logra una gestión eficiente del proceso productivo, ahorra energía, protege vidas e infraestructura y asegura la continuidad operativa del proceso. A diferencia de la minería tradicional, la minería inteligente utiliza la digitalización como parte de todo su proceso operativo, desde la exploración y extracción hasta el procesamiento y comercialización.

De acuerdo con cifras de Business Market Insights, se estima que este mercado alcanzará los 970.23 millones de dólares para 2030 en Latinoamérica y registrará un crecimiento del 8.2% para ese mismo año. Esta cifra no solo refleja el crecimiento económico, también la transformación tecnológica que estamos viviendo.

Actualmente en la región, las minas inteligentes con tecnologías ya implementadas pueden automatizar sus operaciones más rápido, en comparación con aquellas que están rezagadas en la adopción de tecnología. Mediante la implementación de tecnologías avanzadas, los operadores mineros pueden ampliar su red inalámbrica existente de sensores integrados y avanzar en la digitalización de la mina, según destaca el mismo informe.

Tecnologías clave para la digitalización de procesos en la industria minera

En el último año, el big data y la inteligencia artificial (IA) se han convertido en tendencias clave de la minería inteligente. Ambas tecnologías brindan soluciones para optimizar la productividad y resolver los retrasos en el flujo de materiales, además de enfrentar los desafíos tradicionales y adaptarse a las dificultades cambiantes de la industria.

En Latinoamérica, hemos visto un creciente uso de tecnologías de inteligencia operativa (OI), como el monitoreo inalámbrico y el mantenimiento predictivo, para ayudar a los operadores mineros a rastrear las características operativas y gestionar los riesgos asociados con la minería. En tiempo real, la recopilación de datos digitales reemplaza la recopilación manual de datos en el campo y permite una mejor toma de decisiones.

¿Por qué implementar la inteligencia artificial y el big data en la industria minera?

En Vertiv, hemos visto cómo la minería ha evolucionado aprovechando la inteligencia artificial (IA) y otras tecnologías inteligentes en la exploración de minerales, la analítica digital y el reconocimiento visual para la seguridad operativa, el Internet de las Cosas (IoT) para la detección de problemas en el transporte y la carga, y la automatización robótica (RPA) para aumentar la eficiencia y la productividad.

En el presente y hacia el futuro, la minería tiene diversas aplicaciones de IA que prometen mejorar la productividad de la industria. Entre ellas se destacan:

Prospección y exploración: Los algoritmos de IA pueden revolucionar este proceso combinando datos geológicos, topográficos, mineralógicos y cartográficos. Además, identifica anomalías y variaciones en los datos, permitiendo estimar la probabilidad de mineralización. Esto genera un análisis más rápido y preciso de la gran cantidad de datos, prediciendo con mayor exactitud las zonas con una alta probabilidad de contener yacimientos minerales.

Monitorización de equipos: La inteligencia artificial puede tener un impacto significativo en la productividad minera, ya que junto con el Internet de las Cosas (IoT) permite monitorizar las condiciones y los equipos en tiempo real. Así, podemos analizar instantáneamente la información recopilada y generar alertas sobre cuándo intervenir en los equipos. Se ha demostrado que esto no solo prolonga la vida útil de los equipos, sino que también reduce los costes operativos.

Ventajas del uso de la inteligencia artificial en la minería

En mi experiencia en Vertiv, he visto cómo los equipos de minería automatizados pueden generar enormes cantidades de datos útiles. Combinar esta información con IA y aprendizaje automático promete ayudar a mejorar la seguridad y la eficiencia operativa.

Por ejemplo, Business Market Insights informa que la instalación de software de automatización permite al operador de la mina supervisar de forma remota los activos estáticos y móviles, y programar interacciones automatizadas entre ambos. Además, los camiones automatizados realizan operaciones mineras utilizando una red de sensores físicos y un sistema de software configurado y gestionado a distancia, un proceso que, anteriormente, requería una flota de conductores de camiones.

Sin embargo, la implementación de soluciones de IA requiere más procesamiento y alta densidad, así como una columna vertebral de infraestructura digital crítica sólida y versátil que soporte las necesidades de redes de datos, nube, medidas cibernéticas y salas de datos robustas.

Para aprovechar esta minería 4.0, las empresas deben implementar tecnologías avanzadas para aumentar la capacidad y lograr eficiencia energética, redundancia y disponibilidad.

En Vertiv, comprendemos las complejidades y desafíos de las operaciones mineras, y estamos convencidos de que la industria requiere soluciones de infraestructura digital crítica eficaces y fiables, diseñadas para soportar condiciones extremas en entornos industriales, desde corrosión, humedad, entornos salinos, altas temperaturas, polvo, gran altitud, actividad sísmica hasta nieve.

Por esta razón, consideramos que el sector requiere de una gama completa de soluciones para dar soporte a aplicaciones críticas, incluyendo SAI, sistemas de gestión térmica, racks, unidades de distribución de energía en rack y centros de datos modulares prefabricados para múltiples racks o para un único armario. Esta infraestructura es clave para continuar evolucionando, aumentando su eficiencia y sostenibilidad en un entorno cada vez más complejo y demandante.

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