Columnistas
Por Reporte Minero , 8 de abril de 2021Los fundamentos de ENAMI son los correctos
Opinión de Robert Mayne-Nicholls, vicepresidente de la Empresa Nacional de Minería.
Desde sus orígenes, la Empresa Nacional de Minería se construyó en torno al desafío de mantener activa la tradición minera de cientos de familias y emprendedores dedicados a la minería de menor de escala, un importante sector de nuestro país que, con su labor, contribuye con el desarrollo de decenas de economías locales.
Cuando la pandemia todavía nos afecta, la pequeña y mediana minería siguen demostrando su compromiso con Chile. Así también lo hacemos en ENAMI, gracias a la dedicación de cada uno de los integrantes de nuestro equipo, quienes desde Arica a Concepción han permitido la continuidad operacional de nuestras cinco plantas, fundición, poderes de compra y oficinas mineras; además de nuestro rol de fomento, asistencia técnica, procesamiento de mineral y pago oportuno a los productores mineros.
Sin embargo, 2020 fue un año complejo para nuestra institución. La insospechada crisis sanitaria también generó impactos en nuestros resultados. Mayores gastos asociados al reemplazo de trabajadores pertenecientes a grupos de riesgo y a la aplicación oportuna de medidas de prevención en nuestros planteles, detenciones inesperadas de nuestra fundición producto de condiciones meteorológicas adversas, la caída en el tipo de cambio, los pagos en coberturas, entre otros, no nos permitieron alcanzar un desempeño financiero como el que nos habíamos trazado.
Este año, ENAMI cumple 61 años impulsando un modelo de fomento integral único en el mundo, cuya eficacia recogió un reciente estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe-CEPAL.
Te puede interesar: Cepal destaca modelo de fomento de ENAMI para desarrollo de minería artesanal
En ENAMI trabajamos con el orgullo y la convicción de que nuestros fundamentos son los correctos. Somos la única empresa del rubro cuyos resultados no dependen de la cotización del cobre, por cuanto transferimos en su totalidad el beneficio del precio del mineral al productor minero. Buscamos ser el motor que hace sostenible la actividad minera de menor escala, que también se traduce en mayor empleabilidad y encadenamientos productivos locales.
Compatibilizar este desarrollo con el equilibrio financiero de nuestra empresa no es una tarea fácil; es el desafío permanente de nuestra labor, y es en lo que estamos trabajando fuertemente. A partir de agosto de 2020, hemos obtenido márgenes operacionales positivos, que se suman a significativos avances en materia de fomento con impacto.
En los últimos meses, hemos puesto en marcha 55 yacimientos a lo largo del país y proporcionamos un apoyo económico expedito para la continuidad de faenas mineras entre Taltal y Cabildo. Solo en Atacama, la entrega de minerales de pequeños productores aumentó 28%, gracias al apoyo constante de los ejecutivos de fomento en terreno.
De esta manera, al enfatizar en la rentabilidad social de la única institución del Estado de Chile que administra fondos de fomento para la minería de menor escala, también estamos aportando en la descentralización y mejora de la distribución de los recursos a lo largo de Chile. Así ha sido por 61 años y esperamos lo siga siendo por muchos más.
COMENTA AQUÍ