Rancagua busca ser reconocida como ciudad minera y recibir recursos del Royalty

Los antecedentes históricos, sociales y ambientales respaldan esta propuesta, y las autoridades locales y nacionales están comprometidas en lograr un reglamento justo y objetivo.

En una reunión celebrada recientemente, el alcalde de Rancagua, Juan Ramón Godoy, junto a las diputadas Marcela Riquelme y Marta González, y la ministra de Minería, Marcela Hernando, se presentaron los argumentos para que Rancagua sea considerada una ciudad minera y reciba recursos directos del Royalty. Esta propuesta se basa en los antecedentes históricos y sociales de Rancagua, así como en las externalidades negativas que la producción minera ha generado en la comunidad. La búsqueda de este reconocimiento es esencial para la descentralización y el desarrollo de la región.

La historia minera de Rancagua

Rancagua ha sido reconocida históricamente como la capital del Cobre de Chile debido a su estrecha relación con la industria minera. Desde el establecimiento de la mina El Teniente a principios del siglo XX, la comunidad rancagüina ha convivido con las externalidades de la producción minera, incluidos los impactos medioambientales y de transporte. Estos factores respaldan el reclamo de Rancagua como una ciudad minera y justifican la asignación de recursos directos del Royalty para la región.

El reconocimiento de Rancagua como ciudad minera y la asignación de recursos del Royalty no solo benefician a la comunidad local, sino que también promueven la descentralización del país. Estos recursos permitirían impulsar el desarrollo económico y social de Rancagua y sus comunas vecinas, mejorando la calidad de vida de los ciudadanos y fomentando la equidad regional.

El compromiso de las autoridades

Tanto el alcalde Juan Ramón Godoy como las diputadas Marcela Riquelme y Marta González han mostrado su compromiso y apoyo a la causa de Rancagua como ciudad minera. Han recopilado antecedentes técnicos que respaldan la historia minera de la región y abogan por la inclusión de estos criterios en el reglamento que se elaborará. 

Por su parte, la titular de Minería ha mostrado receptividad hacia los argumentos presentados por las autoridades y la comunidad rancagüina. Se comprometió a llevar estos antecedentes al proceso de elaboración del reglamento del Royalty y a considerar los parámetros objetivos que respalden la designación de Rancagua como ciudad minera. Este enfoque busca evitar la arbitrariedad y promover una distribución equitativa de los recursos en función de datos y mediciones confiables.

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